Libro de la Real Travesía
trascendente, pero también porque alude a la Realeza, ya que en todo auténtico viajero hay un hijo del Rey, un príncipe errante, sin corona y sin hogar, y casi sin memoria. Al arrojarse al camino, él va recordando poco a poco este Origen celeste que ha olvidado.
Erase un Rey. Erase un Círculo y erase un Rey. Así comienza la historia, como en un feliz sueño que luego se convertirá en tragedia. Porque el Círculo un día se rompe, y el Reino se desploma y se pierde. Así que emprender el largo viaje en pos del Origen es, no sólo recordar una vieja historia escrita en el libro del alma. Es también salir de un Laberinto y llegar a una Mesa Redonda. Es trazar las líneas del Vidente, del Poeta y del Guerrero, viajeros de la Mesa que aspiran, entre todos, a recuperar el Círculo.
El libro de la Real Travesía es una gesta cíclica, inacabable, que ocurre hoy o dentro de mil años. Su lenguaje natural es el símbolo. Su correlato está en el cielo y en la tierra, porque ambos, cielo y tierra, sueñan cada día con que habrá nuevos caminantes en busca del Reino. leer todo...
