Katie y Elma crecieron separadas por cosas del destino, aunque el mismo destino las uniría, para nunca más estar alejadas la una de la otra. En su niñez inconsciente, su padre Pedro hacía lo posible por unirlas y darles todo el amor, logrando que compartieran como lindas hermanas que eran. La adolescencia las unió de una forma demasiado inesperada. Pedro tiene una pesadilla permanente que lo intranquiliza. Elma sufre y sólo sobrevivirá si encuentran un donante perfectamente compatible. El final no te lo esperas. leer todo...