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EL AGUILA ENJAULADA
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carnal, añorando menos la polimatía de su patrocinador que el menester sexual de sus apetencias humanas. El primero se ha cansado, al igual que Zaratustra, de su abundancia intelectual; su carácter iconoclasta y atrabiliario lo ha envenenado con la misma cicuta de Sócrates, y lo ha aislado a un estado contemplativo, tácito, impotente, vindicativo. El segundo en cambio ha apostatado de la idealidad y la epicidad del genio, y ha canjeado su poca razón por unas copas de brandy al estilo epicureísta. Este proteo insondable constituye, en binomio, el águila enjaulada: éste volaba por el cielo libremente (Yerovi) arrastrando su sombra quejumbrosa por el suelo (Cornelio), hasta que un día al funesto ocaso delicuescente fueron enjaulados por la realidad, y ya tras las rejas el primero añoraba retomar el vuelo, mientras que el segundo deseaba comer nuevamente tierra.
Este libro constituye un cruento pugilismo entre la razón y el idealismo humano (no hablo de idealismo religioso). Los diálogos filosóficos entre los protagonistas nos llevarán a preguntarnos sobre nuestra posición respecto a la realización de nuestros sueños y la saciedad de nuestra carne. leer todo...
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KLEBER ERNESTO OCHOA POZO
Escritor de poesía y filosofía (ESENCIAS Y MATICES, POEMAS ESCRITOS AL APURO, EL AGUILA ENJAULADA) // Ingeniero Químico de profesión especializado en hidrocarburos // Pintor plástico aficionado.