En "LETRAS EN JAQUE", el autor nos sumerge en un apasionante viaje donde el ajedrez se entrelaza con la poesía para romper las barreras de la exclusión y abrir las puertas de la inclusión.
La historia sigue a VLADIMIR, un apasionado por el ajedrez, y un poeta con un don para las palabras. Quien comparte un deseo profundo de crear un mundo más inclusivo, donde las diferencias se celebren y las habilidades individuales florezcan.
Cuando el destino le da una diversidad funcional a nuestro autor, y aborda este problema desde un punto de vista propio entiende la problemática de la inclusión para personas con diversidad funcional, y se apasiona con el tema de una inclusión real y una accesibilidad universal.
Descubre que el ajedrez puede ser más que un juego de estrategia; puede ser un puente que conecta a personas de todas las edades y capacidades. A medida que enseñan a los estudiantes los secretos del tablero de ajedrez, también les enseñan a través de la poesía, compartiendo versos que exploran temas de resiliencia, perseverancia y la belleza de ser uno mismo.
A lo largo de estas páginas, los lectores serán testigos de cómo el ajedrez y la poesía se entrelazan en un baile armónico, brindando a los personajes y a los estudiantes una perspectiva única sobre la vida y la inclusión. Cada movimiento en el tablero se convierte en una metáfora de los desafíos y las oportunidades que enfrentamos en nuestro camino.
Únete a VLADIMIR PEÑA ALTAMAR en su emocionante viaje, donde cada partida de ajedrez y cada verso de poesía nos recuerdan que, somos más fuertes cuando jugamos juntos, este libro apoya a las personas con discapacidad en sus emprndimientos con el 50% de sus regalias, ya que esa poblacion fue la que hiso posible este metodo. leer todo...

Ah, la verdad, ese incómodo invitado que nadie quiere en su fiesta de la vida. ¿Por qué aguantamos mentiras como si fueran monedas de oro y, sin embargo, huimos de la verdad como si fuera una plaga de cucarachas? Es tan simple como decir que preferimos vivir en un mundo de fantasía donde las ilusiones son más reconfortantes que enfrentar la cruda realidad. Después de todo, ¿quién no disfruta de un buen cuento de hadas en lugar de un golpe directo de la verdad, como un balde de agua fría en pleno invierno?
Aparentemente, todos nos convertimos en malabaristas expertos cuando se trata de mantener el equilibrio entre la verdad incómoda y la mentira reconfortante. Claro, podríamos tener una relación basada en la honestidad brutal, pero, ¿quién quiere eso cuando se puede vivir en un eterno juego de escondidas y buscar la verdad bajo la alfombra del autoengaño? Después de todo, la verdad puede ser como una dieta estricta: todos sabemos que sería beneficioso, pero preferimos deleitarnos con las deliciosas mentiras que nos ofrecen un festín de comodidad.
Así que, adelante, sigamos aceptando esas mentiras edulcoradas y justifiquemos nuestras decisiones con medias verdades cómodas. Porque, sinceramente, ¿quién necesita la verdad cuando las mentiras son tan reconfortantes? Es mejor mantenerse en la penumbra acogedora de la ignorancia, donde las sombras de la verdad no pueden perturbar nuestro preciado mundo de ilusiones. ¿No es así de maravilloso vivir en la tierra de la negación perpetua? ¡Oh, la dulce ironía de nuestra preferencia por las mentiras mientras huimos de la verdad como si fuera una plaga de mosquitos en un día de verano! leer todo...