Nací un 18 de enero y resulté apasionada y tozuda como buena capricorniana. Apenas hablaba cuando quise escribir y, gracias a mi amada tía Tere que me ponía una mesita y una sillita de hierro blanco con floridos almohadones, comencé a incursionar en mis primelas letras y, cuando se complicaba, le dictaba poemas y ella los escribía.
Estudié Letras (Lengua y Latín) y he dado clases a jóvenes y adultos.
Tengo tres hijos varones, que son la razón de mi vida y, uno de ellos (el mayor) también salió escritor.
Mi producción literaria es variada y abundante, pero por cuestiones económicas nunca he podido verlas en papel, son los hijos que esperan nacer.
Algunos de los títulos son: "Viviendo con tu espíritu", "Poemas de amor y ciberamor", "Stress, los estadios de mi angustia argentina", entre otros.